Ciudad de Bohane, el lugar en el que se ambienta la primera novela de Kevin Barry (Rayo Verde Editorial), es un lugar oscuro, corrupto y putrefacto. Y es, además, protagonista del libro que lleva su nombre.

Estamos ante un futuro no tan lejano. Un futuro distópico: la violencia domina el carácter de la ciudad, que ahora se encuentra en un estado temporal de tregua, pero que normalmente es el escenario de una guerra de bandas. Ahora es la banda de Logan Hartnett la que tiene el dominio, pero se rumorea que su mayor rival, Gant Broderick, ha vuelto con ganas de cambiar las cosas. Otras bandas también están con ojo avizor, esperando poder aprovechar cualquier señal de debilidad. El destino de la Ciudad de Bohane está en juego.

Ésta es una novela trepidante, llena de ritmo, que se caracteriza por los cambios de registro entre los diferentes personajes y el narrador y por la continua sensación de peligro, que nos ahoga pero nos mantiene enganchados a las páginas. No es una novela lenta ni reflexiva, aunque sí reflexionada, pues consigue justo aquello que se propone: nos inquieta, desasosiega, emociona y fascina.