Hacía bastante que quería leer este libro y por fin le he buscado un hueco. Se trata del segundo libro que escribe J.K. Rowling bajo el apodo de Robert Galbraith y que sigue con la serie que inauguró con El canto del cuco. Este nuevo libro, El gusano de seda, protagonizado por el detective Cormoran Strike y su secretaria Robin, deja ver claramente que no será el último de la saga. De hecho, me suena que pronto tiene que salir el tercero (si no ha salido ya).
Esta vez una señora le encomienda a Cormoran la misión de encontrar a su marido, Owen Quine, un polémico escritor no demasiado conocido y al que le gusta llamar la atención a través de sus extravagancias, desapariciones y ataques personales encubiertos en forma de libros. Cormoran no tarda en descubrir que tras su desaparición se encuentra el último manuscrito del autor, que muchas personas han leído y que salpica negativamente a autores, editores, la agente literaria, varios amigos del autor e incluso a su mujer. Este libro parece destapar secretos ocultos que a mucha gente puede interesarle que no salgan a la luz. ¿Puede que esta vez la desaparición no haya sido una pataleta del autor?
Esto se confirma cuando Cormoran descubre el cadáver del autor, asesinado de la misma manera que muere el personaje principal del libro. En ese momento, todos los esfuerzos del detective irán centrados en demostrar la inocencia de la mujer del autor.
Me ha gustado mucho como en este libro, a parte de la historia principal, también se desarrollan las historias de Cormoran y Robin y se comienza a perfilar la relación entre ambos. Vemos las tensiones que surgen a nivel personal y profesional por varios malentendidos. Vemos también peligrar la relación de Robin con su futuro marido, quien parece que quiere hacerla escoger entre él y su trabajo.
Es un libro inteligente, con un buen ritmo, que entretiene y engancha. Si os gustan las novelas de misterio, id a por él.