¡Ya entramos en la recta final del año! ¿Cómo ha ido? ¿Qué libros habéis leído? ¿Cuáles os han quedado pendientes? Esta es mi lista de libros por leer antes de que termine el año:
1. El destello, de James Dashner
ASÍ SE DESMORONÓ LA VIDA DE MARK:
PRIMERO fueron las erupciones solares, que mataron a millones de personas, entre ellas a su familia.
SEGUNDO, las inundaciones, escasez de alimentos y un calor insoportable.
TERCERO, los supervivientes decidieron salvarse… a toda costa.
CUARTO, ahora un virus ha empezado a propagarse. Nadie sabe sus orígenes ni el remedio, sólo que produce la locura y cosas peores. Ya le han puesto nombre. Lo llaman el Destello.
La trepidante precuela de El corredor del laberinto: ¡más personajes, misterios… y respuestas!
Muchas veces sentimos que nuestra creatividad no encuentra una vía de expresión, o querríamos ponerla en práctica y no sabemos por dónde empezar, o simplemente nos encanta escribir pero nunca encontramos un buen motivo para hacerlo. Con este libro, ¡se acabaron las excusas!
El equipo editorial de la Revista Yorokobu se ha planteado el reto de pensar propuestas de lo más ingeniosas para sacarle el jugo a nuestro lado más creativo. Sólo necesitaremos ponernos manos a la obra.
3. Vestido de novia, de Pierre Lemaitre
Sophie Duguet no entiende qué le sucede: pierde objetos, olvida situaciones, es detenida en un supermercado por pequeños robos que no recuerda haber cometido. Y los cadáveres comienzan a acumularse a su alrededor.
No podemos desvelar nada más de este thriller para así mantener intacto el escalofriante placer de la lectura y la adictiva búsqueda de la verdad por parte del lector.
Por el ganador del Premio Goncourt con Nos vemos allá arriba, el Premio de Novela Negra Europea, el Premio del Festival de Cine Policiaco de Cognac, el Premio del Salon du Polar, el Dagger Award, el Premio Lire a la mejor novela francesa, el Premio Roman France Télévisions y el Premio de los Libreros de Nancy-Le Point, con medio millón de lectores.
4. Milena o el fémur más bello del mundo, de Jorge Zepeda Patterson
La belleza de Milena también fue su perdición. Convertida en esclava sexual desde la adolescencia, intenta huir cuando muere su protector, un magnate de la comunicación que sufre un fallo cardiaco mientras hace el amor con ella. En su angustiosa fuga, se cruza con los Azules, un trío de justicieros formado por el periodista Tomás Arizmendi, la política Amelia Navarro y el especialista en alta seguridad, Jaime Lemus. Ellos desean liberarla, pero Milena guarda con recelo un espinoso misterio que atesora en su libreta negra y que supone su salvación y, sobre todo, su venganza.
Una vigorosa novela de acción y amor que denuncia los abusos de poder y la corrupción, pero que sobre todo, nos muestra el alma abierta de una mujer vejada, como tantas otras, en un mundo cada vez más globalizado.
5. Las guerras del agua, de Cameron Stracher
Bienvenidos a un futuro donde el agua vale más que el oro o el petróleo. Todos la buscan y hay quien mata por ella.
Los ríos se han secado, los casquetes polares se han derretido y las últimas reservas de agua potable están en manos de quienes pueden pagar el precio. Incluso hay multas por derrocharla.
Pero en la clase de Vera hay un chico al que no parece preocuparle esa posibilidad: un día llega bebiendo agua y tira las últimas gotas a la tierra ardiente. «Yo tengo mucha», explica. Poco después, desaparece y todo indica que no por voluntad propia.
Será entonces cuando Vera y Will se embarquen en un peligroso viaje para buscarle.
6. Noventa y ocho segundos sin sombra, de Giovanna Rivero
Una novela sobre la realidad latinoamericana actual extremadamente afilada, despiadada y a la vez poética y delicada.
Por más que el derecho a la búsqueda de la felicidad forme parte de la Declaración de Independencia de los Estados Unidos de América, todo aquel que por edad, sabiduría o gobierno sea consciente de que ni la Lotería ni los Reyes Magos ni las Editoriales Independientes existen sabe que el deseo de ser feliz es una de las más dañinas armas de destrucción masiva.
Y sin embargo nos preguntamos: ¿es posible no creer en el Paraíso cuando todo a tu alrededor es un Infierno?
-No.
¿Puede una hija adolescente sobrevivir a las ensoñaciones delirantes de una madre insatisfecha y a las enseñanzas de un padre empeñado en sostener las furias y fobias de un trotskismo trasnochado?
-Más o menos pero más bien menos que más. Eso cuenta esta novela.
Porque la adolescencia duele pero es quizá el único momento de la vida en que se está verdaderamente dispuesto a llegar hasta las últimas consecuencias de lo que sea sin un ápice de culpa. Porque Genoveva tiene dieciséis años, estudia en un colegio de monjas y vive, como ella dice, en el Culo del Mundo, en un pueblo de la Latinoamérica profunda donde la modernización está llegando de la mano del narcotráfico. Porque no le gusta lo que ve, no le gusta lo que toca, no le gusta ni la vida que tiene ni la vida que le espera. Y por eso -y por lo otro-, con una voz contradictoria, intensa, impúdica, impávida y casi amoral a fuerza de tanta inocencia que destila, nos cuenta sus secretos y sus anhelos y los claroscuros de una espiritualidad crédula dispuesta a creer en lo que sea con tal de salir del aquí para llegar vete tú a saber dónde.
7. El monstruo de Hawkline, de Richard Brautigan
Nada es imposible en El monstruo de Hawkline, un western cómico-gótico considerado como uno de sus textos más convencionales. ¿Y qué es «convencional» para Brautigan, el gurú de la contracultura estadounidense? Pues una pareja de cowboys asesinos a sueldo, una Niña Mágica, dos hermanas idénticas y un mayordomo gigante enterrado dentro de una maleta en una mansión amarilla de Oregón rodeada de nieve aunque el termómetro marque más de 30 grados. Una casa encantada donde sus habitantes se quedan desnudos repentinamente o pierden el hilo enzarzándose en conversaciones delirantes (y en posturas sexuales impensables) mientras intentan resolver un caso: el de un monstruo, surgido de un experimento fallido con unas enigmáticas Sustancias…
Uno de los libros más célebres de los setenta y de Richard Brautigan, el escritor más milagroso de la literatura estadounidense del siglo xx. Uno de esos autores que cuentan con tantos seguidores apasionados que su apellido es ya un adjetivo. Sin duda, una novela muy Brautigan.
8. El verdadero final de la Bella Durmiente, de Ana María Matute
Como todo el mundo sabe, cuando el Príncipe Azul despertó a la Bella Durmiente, se casó con ella y se la llevó a su reino. Pero las historias no siempre acaban en el momento feliz, sino que la vida sigue y comienzan los problemas. Esta es la verdadera historia de cómo la Bella Durmiente se encuentra con la vida real, una vida en la que su príncipe no es tan azul ni su reino tan maravilloso, y en la que además entra en juego un oscuro personaje: Selva, la temible Reina Madre.
9. Vampiros y limones, de Karen Russell
En el maravilloso cuento que da título a este volumen, dos vampiros en un limonar inundado de sol intentan desesperadamente saciar su sed de sangre, en una inolvidable parábola sobre la adicción y el ansia, el pavor y el amor mortales. Le siguen siete relatos protagonizados por los más sorprendentes protagonistas: un adolescente (enamorado) que descubre que el universo se comunica con él a través de unos talismanes abandonados en un nido de gaviotas, una comunidad de mujeres que se transforman lentamente en gusanos de seda humanos para tejer delicados hilos extraídos de sus propias entrañas, una masajista que descubre su poder sanador manipulando los tatuajes en el torso de un veterano de guerra…
La autora también arrastrará a sus lectores hacia los fantasiosos (pero tan reales) mundos de los dos últimos relatos: en el desastroso intento de una familia de colonos por hacerse con la propiedad de unas tierras en el Oeste, el monstruo es el ansia humana de posesión, y la víctima lo más preciado de la vida; finalmente, cuando una pandilla de chicos encuentra un espantapájaros mutilado que guarda un inquietante parecido con el compañero de clase desaparecido al que solían atormentar, lo que podría haber sido una historia común sobre acoso escolar deviene una siniestra historia de culpa y expiación.
10. Pronto seremos felices, de Ignacio Vidal-Folch
Un viajante comercial español dedicado al import-export trabaja en el establecimiento de su empresa en los países del Este. Mientras el orden mundial se resquebraja y tras los años convulsos pasados en Praga, en Budapest, Sofía, en Moscú…, años de aprendizaje, de amistad, de amor, vuelve a esas ciudades en las que se reencuentra con algunas de las personas esenciales de su vida, que como él, ya no son las mismas.
El viaje de vuelta a Praga, que oficialmente tiene como objeto una transacción comercial, se convierte en el punto de partida de un asombroso itinerario vital impulsado por el reencuentro con Kamila, su eficiente y fiel colaboradora durante años que desapareció de pronto como si una movediza tierra de oscuros intereses políticos se la hubiera tragado. La búsqueda de Kamila es sólo el comienzo de otros reencuentros que descubrirán al protagonista quiénes eran realmente las personas con las que convivió, qué había por debajo de lo que no sabían, o no podían contar.