«Tienes hasta las diez»: el punto de partida
Tras volver del funeral de su queridísimo padre, fallecido el día anterior, Antonio recibe un e-mail. Lo curioso es que el correo es enviado desde la cuenta de su padre y viene firmado por él. ¿El mensaje? «Hijo querido: tienes hasta las diez». ¿Qué querrá decir el que lo ha enviado? ¿Quién y por qué lo habrá hecho? ¿Qué debe hacer Antonio?
Este es el argumento del que parte Tienes hasta las 10, de Francisco Castro. Una historia de intriga y suspense en el que una serie de mensajes en forma de e-mails, cartas, libros y otras pistas darán pie a un juego que llevarán al protagonista a descubrir un suceso del pasado.
¿Por qué leerlo?
El título parece indicarnos que nos encontramos ante una novela trepidante, en la que alguien tiene un tiempo limitado para resolver un misterio. Pero lo cierto es que no es así: esta es una novela en la que nos sucesivos misterios se resuelven con calma. Cada punto queda bien explicado y, al final, todo cuadra perfectamente.
Es un libro coherente, en el que las respuestas a los distintos misterios tienen mucho sentido y en que todo está contado en el momento más adecuado para ello. Entendemos perfectamente cuál es el mensaje que se quería transmitir al protagonista y por qué tenía que hacerse en ese momento y no antes.
Esta es una novela que he disfrutado mucho y que os recomiendo sin lugar a dudas. La tensión y el misterio van creciendo a medida que vas leyendo, lo que hace que, aunque el ritmo no sea de taquicardia, te tenga sentado leyendo hasta el final.
De este autor ya os había recomendado Spam, pero tengo que decir que esta novela me ha gustado aún más. De todas formas, si os gustan las historias de misterio, tampoco la dejaría pasar.